Aunque a veces suene mas conveniente comprar leche de almendras en el supermercado, hay muchas otras razones por las que prefiero prepararla en casa:
1- Puedes controlar la calidad de los ingredientes. Lamentablemente aquí en Peru, la mayoria de leches de almendras que he visto son procesadas y contienen una lista enorme de ingredientes. Si todavía no lo sabían, esto es una mala señal. Si la preparas en casa vas a saber exactamente qué es lo contiene esta leche. No preservantes, no aditivos, solo leche de almendras pura.
2- Hay menos desperdicio. Puedes preparar la cantidad exacta que vas a usar en los próximos días. Ya que este es un producto que dura de dos a tres días en la refrigeradora (considerando que es leche de almendras natural) no queremos terminar botando nuestro dinero por el caño. La leche de almendras mas natural que he encontrado en las tiendas, viene en botellas gigantes que sé no voy a poder consumir en tan corto tiempo.
3- El sabor es mucho mejor. Si no te gusta la leche de almendras regular siempre puedes agregar cosas que puedan hacerla mas interesante, como vainilla, cocoa, canela, etc, etc. Ademas que todo lo hecho en casa es mas rico.
Les voy a incluir la receta por aquí aunque también he compartido esta receta en instagram a travez de mi IGTV y también en facebook.
LECHE DE ALMENDRAS
Ingredientes
- 1 taza de almendras frescas hay que dejarlas remojando en agua fría toda la noche
- 5 tazas agua filtrada
- Opcional:
- 2 ó 3 dátiles o el endulzante de tu preferencia
- 1 cdta esencia de vainilla
- 2 cdas cacao en polvo si quieres hacerlo con sabor a chocolate
- 1/2 taza frutos rojos si quieres hacer un berry milk
Preparación
- Escurre las almendras y ponlas en la licuadora.
- Agrega el agua con las almendras y empieza a licuar. Empieza con una velocidad baja y ve subiendo poco a poco. Deja la licuadora correr por 1 o 2 minutos. (Agrega también los ingredientes opcionales en este momento).
- Vacía la leche a un bowl cubierto con el pedazo de tela para colar la leche, Exprime muy bien la pulpa, exprime lo más que puedas hasta que no salga más líquido.
- Listo. Ponla en un contenedor con tapa y métela al refrigerador y úsala como cualquier otra leche.
- NOTA: No botes la pulpa que queda de las almendras, puedes usar esto en muchas recetas como galletas, granola, power balls, etc.
Mira el video aquí: